El Manchester City, con aroma al final de la Premier League de 2012, remontó un 0-2 al Aston Villa en cinco minutos y se llevó su cuarto título liguero en los últimos cinco años.
Los de Pep Guardiola coquetearon con el desastre durante 75 minutos, perdiendo 0-2 por los goles de Matt Cash y Philippe Coutinho, pero desataron una remontada brutal en los últimos quince minutos.
En un espacio de cinco minutos, Ilkay Gundogan, con un doblete, y Rodri, con un golazo desde fuera del área, dieron la vuelta al marcador y confirmaron que el título, una temporada más, es celeste.